Luguy - Léturgie - Fauche (Dargaud. 1988)
Grijalbo/Dargaud (1988 - redistribución Norma: 2008)
Edición original: Les clefs de feu
Edición original: Les clefs de feu
Atención: este artículo puede revelar detalles sobre el argumento.
Ya estamos de regreso, al igual que Perceván de vuelta desde el desierto de El Jerada, sin saber que apenas puesto un pie en su tierra va a meterse de lleno en un nuevo periplo de imprevistas consecuencias que se prolongará durante los próximos tres álbumes. En efecto, con Las Llaves de Fuego se inicia la que hasta ahora se ha convertido en la aventura más larga del Perceván de Luguy y Léturgie (también de Fauche, que hace en esta trilogía su última aportación a la serie por el momento) y se ha venido a llamar el Ciclo de Ainock.
Una macro-historieta, coloreada en sus tres volúmenes por Chagnaud y Ducasse, que en Francia goza desde finales de 2005 de una edición renovada en un integral bajo el título Les ombres de Malicorne (Las Sombras de Miunicornio), al que acompaña un cuaderno de bocetos de 8 páginas. Integral que, por cierto, constituye la última novedad aparecida en el país galo sobre Perceván en esta espera en la que Dargaud -no se sabe exactamente por qué motivos- mantiene a los seguidores de la colección y que parece va a continuar hasta bien entrado el 2010.
Sobre el álbum presente podemos decir que nos introduce en una de esas aventuras que supone una carrera alocada en un pulso constante contra las fuerzas del mal y acaba cobrándose de nuestros héroes un alto coste. Un mítico escudo capaz de desencadenar el infierno sobre la tierra -creado muchos siglos atrás por Ainock, un hechicero enloquecido- y actualmente bajo custodia del poderoso mago Sharlaan para evitar una catástrofe, ha sido sin embargo robado delante de sus propias narices. Obviamente, en manos malintencionadas se vuelve una amenaza terrible: es una de las llaves que garantiza el acceso a nuestro mundo a un ejército de guerreros del averno, que algún ser maléfico parece tener la intención de poner a su servicio con la ayuda del nigromante Cienciencias. Para activar las fuerzas del escudo es necesario además conocer una segunda clave que haga realidad semejante pesadilla: la ubicación donde espera inmóvil esta tropa de guerreros invencibles.
Sharlaan apela al caballero pelirrojo y su gordo compañero para que le ayuden a impedir la tragedia, bien sea interceptando a los ladrones del mortal artefacto (quienes no son otros que el inefable barón Piedramuerta y su palurdo sirviente Polémic), bien acudiendo a proteger al honorable señor del castillo de Monterrojo, heredero de Ainock el Viejo, la única persona que aparentemente podría conocer el secreto del lugar que alberga la hueste del infierno, cuya intachable reputación le aleja de parecer sospechoso del hurto y de ser capaz de un plan tan macabro.
Una vez más, Perceván y Kervin toman las riendas de sus monturas y emprenden la misión que Sharlaan, más intrigante de lo que nos pudo sugerir en su anterior aparición, les ha encomendado. Pero las señales de este camino no hacen sino advertir al caballero de un inexorable destino, oscuro y peligroso como nunca antes. Uno de los episodios más graves en la vida de Perceván está a punto de hacerse realidad. Y es que los héroes, tan falibles como el resto de los hombres, no siempre salen victoriosos de sus causas...
Los autores parece que quisieron reconciliarse con el lector en esta aventura, que después de la historieta anterior, que no acabó de convencer a muchos (sobre todo tras la calurosa acogida que en su momento recibió El País de Aslor, uno de los títulos predilectos) recupera a algunos de los personajes que mejor calaron entre su público. Tal es el caso del mago Sharlaan, al que dotan de la misma ambigüedad a la que en un primer momento nos inducía Balkis (no presente en este álbum, pero sí en los dos siguientes que componen el ciclo) antes de descubrir abiertamente sus intenciones. Pero sobre todo del dúo, más digno de lástima que de temor (pese a su carácter antagonista) formado por Piedramuerta y Polémic, que vuelven a aportar la mayoría de las escenas cómicas, compitiendo directamente con el siempre ocurrente Kervin, sobre todo en su incesante intercambio de golpes y exabruptos. Este par de patanes parece condenado a saltar de saga en saga para, con su torpe actuación, acabar poniendo en algún aprieto a Perceván: lo hicieron durante el ciclo de Ingaar, tendrán un papel frecuente en este de Ainock y reaparecerán de nuevo en el del Apocalipsis. Genio y figura...
Los escenarios, tan coloristas como siempre, siguen estando llenos de detalles como es costumbre en Luguy, del que admirablemente se puede afirmar que hasta el momento no se nota cansancio en el trazo. Yo, que soy un loco de los castillos, no puedo por menos que agradecer las fabulosas edificaciones que el dibujante nos muestra durante estas páginas en su libre interpretación de la Edad Media: la pequeña residencia de Monseñor Guillaume, Monterrojo, Miunicornio; a cada una de las cuales aplica el aire que desea conferirle y transmitir al lector, la acogedora luminosidad del primero, la opulencia y el tétrico ambiente ruinoso respectivamente de los otros dos. Otro tanto se puede decir de los vivos paisajes.
Entre las 'estrellas invitadas' que se cuelan tan a menudo en los álbumes de la serie, tenemos en esta ocasión a unas de lujo. Nada menos que el propio Régis Loisel aparece caricaturizado en la figura del director de la compañía de comediantes que comparte velada nocturna con nuestros protagonistas. Simpático homenaje de los autores de Perceván a un compatriota y amigo, brillante autor de bande dessinée, que además no está solo, sino que cuenta con la grata presencia de su Pelisse, de La Búsqueda del Pájaro del Tiempo, fielmente caracterizada en el personaje de Malice, pitonisa que leerá el porvenir de Perceván de la palma de su mano haciéndole la más funesta de las predicciones, que el caballero no creerá.
Cierra el círculo de feriantes un pintoresco domador de osos que es la fotografía misma en viñetas del coguionista de la serie, Xavier Fauche, ataviado con una vestimenta escocesa, ya que es originario de este país. Por si fuera poco, otro colega de profesión (Jean-Pierre Dirick, autor prácticamente desconocido por aquí) queda reflejado en papel como el señor Gregorio de Ainock.
Esta entrega supone un verdadero contrapunto con las anteriores, al tener uno de los finales más tenebrosos hasta ahora vistos, que sentará precedente para la conclusión de futuros álbumes. Y es que, desde luego, la colección adquiere una mayor madurez y crudeza a la hora de contar las cosas que se irá acentuando progresivamente, no por ello dejando de lado un evidente carácter humorístico y juvenil (a pesar de que yo siempre he defendido que, aún dentro de su línea, 'Perceván' posee un tono más serio que el de otras obras en la misma vertiente francobelga al contemplar, por ejemplo, la muerte y la pérdida de una forma más realista). Sin duda, la última página logra dejarnos estupefactos e inevitablemente enganchados a su inmediata continuación. Seguiremos ahondando en esta épica trilogía con su siguiente volumen: Los Señores del Infierno.
12 comentarios:
¡Has vuelto! ESpero que hayas pasado unas buenas vacaciones ;)
Hasta que Norma no re-distribuyó los siguientes percevanes, éste fue el último que tuve de la colección (bueno, mi padre). El final me dejó intrigado durante años... hasta que Norma Editorial publicó las continuaciones, comics que yo compré.
Muy buena entrada ;)
Saludos :D
¡Caramba! Pues aguantar varios años para continuar la historia, teniendo en cuenta la incertidumbre con que deja el final de ese número 6, ya tiene mérito... Supongo que luego recuperaste su lectura con muchas ganas.
Saludos.
Hola de nuevo, Jolan. Reconozco que Percevan es una de mis asignaturas pendientes; quizás me puedas recomendar por dónde empezar con esta serie. Saludos!
Hola Jose Luis! Pues te diría que desde el principio, la verdad, ya que en Perceván, aunque no se siga un orden cronológico estricto (salvo dentro de cada saga, claro) sí hay referencias a álbumes anteriores y personajes repescados del pasado. Eso sí, estos comics son fantasía heroica pura y dura, de un estilo caricaturesco tipo Asterix, pero más realista... por lo que si no es una línea que te atraiga especialmente, quizá te dejen un poco frío.
Por decirte un buen número independiente, La espada de Ganaël me parece una elección perfecta para probar. Saludos!
Que alegria ver un nuevo post!
Saludos desde Argentina!
Saludos, Agustín.
Para mi también es una alegría encontrarme con comentarios de visitantes del otro lado del charco. :)
Es bueno ver que has vuelto a las andadas. Un gusto para los amantes del comic de fantasia.
Bienvenido de nuevo.
Yo tambien tendre que ponerme manos a la obra con mi blog.
Saludos.
Buena reseña y buen blog, mis felicitaciones.
A mí me pasó como a Nickrar_Dopi, "Las Llaves de Fuego" fue el último álbum de Percevan que compré (o mejor dicho, que me compraron) en mi niñez. Durante años he sufrido en silencio (XD) la duda de qué ocurrió con el buen caballero. Lo peor es que no he comprado aún las continuaciones (El Jerada se lleve a los precios abusivos que tienen estos cómics...), tendré que ponerme a ello.
Un saludo!
Selenio.
Gracias, Selenio, y bienvenido. ;)
Pues ahora que tienes la posibilidad, anímate a continuar las historietas de Perceván, hombre! Aunque entiendo perfectamente la frustración de tener que pagar a precio de álbum nuevo los que ha redistribuido Norma...
Bueno, siempre nos quedan las bibliotecas o la sección de lectura del Fnac! :D
Saludos!
Yo conoci a Percevan a traves de este blog...estoy muy agradecido! Una verdadera delicia comiquera! Excelentes dibujos, argumentos atrapantes y personajes queribles. Los informes son muy buenos y estan esplendidamente escritos.
Soy autor integral de comics y fanatico del BD. Si quieren pasar por mi blog para conocer mi trabajo, sobre todo mi version del Kalevala (la epopeya finlandesa, pero seguramente sabran de que hablo), estare encantado. Un saludo! (Repito el mensaje porque lo envie en un post mas antiguo y quiza no lo lean).
¡Hombre, diego, pues me alegra saber que al menos esta sección está sirviendo para que alguien que no conocía a Percevan lo haya hecho!
Sinceramente, no conozco ese Kalevala, así que déjame que le eche un vistacillo a tu blog para enterarme mejor, y te comento!
Saludos!
Muchas gracias, Jolan, por tu comentario. Un gustazo verte por mi blog. Te cuento que tengo unas cuantas paginas de Kalevala! y actualmente se esta publicando en la revista de una federacion de paganismo española, http://www.pfi-esp.org/ por entregas. Ojala algun dia pueda publicarla en su totalidad en albumes, pero para eso necesitaria que alguna editorial se interese. Un abrazo!
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